LA INQUISICIÒN, Y EL CASO PÌO MORTARA.

Un Papa, con pasado.

En 1858, en Bologna, Italia, una familia de origen hebreo, de buena posiciòn econòmica, cuyo padre se llamaba Mòmolo Mortara, recibiò, en altas horas de la noche, un llamado a su puerta.

El padre, Mòmolo, atendiò extrañado, y se encontrò con una fea sorpresa. Acompañado por soldados, el Padre de la Iglesia Catòlica local, llamado Gaetano Feletti, le exigìa la entrega de su hijo de 12 años, Edgardo.

A pesar de sus quejas, y del llanto de la madre, el niño fue arrancado de sus brazos, y llevado con rumbo desconocido.
Al dìa, siguiente, Mòmolo Mortara buscò al Padre Feletti, convencido de que el rapto, se trataba de un error, pero el Padre Feletti, no le dio explicaciones. Dijo que le estaba prohibido hablar.

Ocurrìa que Feletti, pertenecìa al "Santo Oficio", o sea, la vieja Inquisiciòn, la cual, si bien ya no torturaba herejes, aùn mantenìa ciertas prerrogativas y poderes.

Hay que recordar, que, en ese tiempo, no existìa un estado Italiano. En el norte, mandaban los austrìacos. En el sur, gobernaba España. Y todo el centro de la actual Italia, existìan los "Estados Pontificios", cuyo Rey, era el Papa Pìo IX.

Y resultaba que una de las "tareas" del "Santo Oficio", era resguardar a la gente bautizada, de la herejìa judìa. Y el Papa, ( o sea, el Rey ), los apoyaba.

Pero, segùn su padre, Edgardo Mortara NO habìa sido bautizado. Era judìo practicante! Esto debìa tratarse de un error.
Asì fue como se dirigiò directamente a Pìo IX, exigiendo la devoluciòn de su hijo, que habìa sido alojado en el convento de los "Catecùmenos", la orden encargada de cumplir las òrdenes del "Santo Oficio".

Grande fue su sorpresa, cuando se le contestò que una vieja criada, que habìa trabajado años antes en su casa, llamada Ana Morizzi, habìa confesado que, "durante una enfermedad del niño, y temiendo que èste muriese, ella lo habìa bautizado, con un poco de agua, para que fuese al cielo."
Entonces, la Inquisiciòn, (moderna, pero Inquisiciòn al fin), "tuvo que actuar, en resguardo del niño". Como estaba bautizado, no podìan dejarlo en manos de una familia judìa. Aunque fueran los padres!

Claro, habìa un tema. El "Santo Oficio", pagaba este tipo de confesiones, y Ana Morizzi, habìa cobrado por revelar lo del bautismo.

Mòmolo Mortara, que tenìa influencias, agotò todos los recursos. Hasta la familia de banqueros que financiaban al Papa, los Rottschild, intercediò por la devoluciòn del chico. Pero en vano. Pìo IX, habìa tomado la "salvaciòn del alma de èse niño, como un asunto fundamental de la Iglesia".

Mòmolo solo pudo ver a Edgardo, casi un año despuès, y siempre en presencia de los hermanos catecùmenos. Estos, ya tenìan tan aterrado al chico, con la perdiciòn de su vida eterna, que el niño nunca quiso volver con sus padres.
Incluso, ya en 1870, cuando los estados Pontificios desaparecieron, el Papa le escribiò a Edgardo, dicièndole, "Paguè un alto precio por ti, pero Dios lo quiso".

Edgardo, entonces, se ordena sacerdote con el nombre de su "benefactor": Pìo Mortara".

El sacerdote Pìo Mortara, nunca volviò a ver a su familia, y muriò, casi nonagenario, en un monasterio de Belgica, al estallar la segunda guerra mundial.

Fue la ùltima "Acciòn heroica", del "Santo Oficio"?. No.

Recibieron tantas crìticas, (incluso el sacerdote Gaetano Feletti, fue condenado a prisiòn, por rapto), por el caso Mortara, que, en 1908, se cambiaron el nombre a "Congregaciòn para la Doctrina de la FE".

Y desaparecieron? Tampoco.

El ùltimo jefe de la "Congregaciòn para la doctrina de la FE", (alias el "Santo Oficio"), (alias "la Sagrada Inquisiciòn"), dejò su puesto en 2005, para ser proclamado Papa.

SÌ. BENEDICTO XVI, fue el ùltimo inquisidor!

Buenas noches.

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